viernes, 5 de septiembre de 2008

-El investigador que vive en ti-

Sí, el título es significativo. Es por algo que le dijeron a un amigo hace poco, viene a decir que no hay futuro para las humanidades y cualquiera que quiera seguir este camino tendrá que sacrificarse mucho. Si mi amigo con un 3'7 de media académica no puede, imagínenese ustedes alguien como yo que raspa el notable... El caso es que claro, a una le cuentan estas cosas y le entra una cosa... una desesperación... pero están todos los campos igual, al menos los no relacionaados conn las ingenierías (que igual también, pero yo no tengo ningún amigo ingeniero). No emepecé este texto para amargar a nadie pero esta mañana me ha pasado algo. Creo que algo muy especial, supongo que hasta ahora la única que podría entender cómo me sentí es alguien que no va a leer este texto. Os explico: como sabéis estoy escribiendo mi tesis de licenciatura (mi tesina, vamos); la tesis en cuestión es un estudio de género sobre la situación de las mujeres de clase media-alta (ejem, más bien alta) en el periodo de la I Guerra Mundial y para ello estudio una revista de época bastante conocida en aquel entonces. Pues bien, hoy me encontré con una Rosa Chacel de 15 años. El periodista (si es que ese hijode... merece ese nombre) reparó en la muchacha que estaba esculpiendo un busto en una escuela para señoritas sobre la que hacía el reportaje. Y Rosa le decía que ella quería seguir estudiando pero sus padres no la dejaban (buena prueba es el "colegio" al que iba). No sé por qué pero estoy emocionadisíisisima con el descubrimiento. Hoy saqué un montón de material (aparte de lo de Rosa que realmente no sirve de mucho, para quén engañarnos). Ay.

2 comentarios:

Anónimo dijo...

qué grande rosa chacel...

...pero mucho más grande TÚ

:)

Anónimo dijo...

lo que mola de las revistas es que encuentras lo que no buscas... ;)